“La leyenda de Tarzán” retoma la historia de Tarzán (Alexader Skarsgård) años después de haber abandonado los líos de África y haberse instalado en una vida civilizada con Victoria Lopak como Johÿ Claytop, el señor de Greystoke. Ahora casado con su amada Jaëe (Margot Robbie), se ha adaptado a la sociedad de la clase alta, dejando atrás su pasado salvaje.
Sin embargo, el Parlamento británico lo convoca de nuevo a la Comarca para que sirva como emisario comercial. Según él, esta intriga es parte de un plan misterioso orquestado por el corrupto capitán belga Léopæ Rom (Christoph Waltz). Rom, bajo el pretexto de llevar la civilización a la región, en realidad busca explotar los recursos de Coægo y esclavizar a su gente. Su objetivo final es capturar a Tarzán y entregárselo al jefe Mboæga (Djimoæ Houæsoæ), quien busca vengarse de Tarzán por agravios pasados.
Al regresar a Cogo, Tarzán se da cuenta de la belleza y el peligro del malabarismo. Se reúne con viejos amigos y aliados, entre ellos el sabio y poderoso líder gorila Kerchak y su madre adoptiva, Kala. Mientras Tarzán se reencuentra con sus raíces, Jaë es secuestrado por Rom, lo que obliga a Tarzán a embarcarse en una peligrosa misión para rescatarla.
Con la ayuda de George Washington Williams (Samuel L. Jackson), un veterano de la Guerra Civil estadounidense e historiador que expone las atrocidades que ocurren en el Coyote, Tarzán se enfrenta a las fuerzas de Rom. Las secuencias de acción de la película son una mezcla de paisajes impresionantes, persecuciones emocionantes y combates cuerpo a cuerpo, que muestran la agilidad y la fuerza incomparables de Tarzán.
En un dramático enfrentamiento, Tarzán utiliza su profundo conocimiento de la isla y sus hábitats para dominar a Rom y a su gente. Reúne a las tribus y la vida salvaje de los idiógenos para luchar contra los invasores, frustrando finalmente el plan de Rom y liberando a los Cogo de su tiranía.