La confrontación comienza con Nuada, quien desestima a Hellboy, considerándolo un mero mortal sin la nobleza necesaria para retarle. Sin embargo, la determinación de Hellboy, hijo del Caído, le otorga el derecho a desafiar al príncipe. En un momento clave, Hellboy declara con confianza que no tiene intención de matar a su oponente, sino de derrotarlo en combate.